
Estaba en deuda con La Feliz. Y con el diario La Capital. Y con el Festival Azabache.
Bueno, este cuento -que si todo sale bien estará el año que viene en un libro que se titulará Nadie es inocente- viene a saldar esa deuda.
Se llama Blanco artificial, y es uno de esos homenajes cruzados que tanto me gustan.
Lo pueden leer o descargar. Está acá, en la última página del suplemento del domingo pasado.
Una vez más gracias a Fernando.
Ojalá les guste.
Salud!
Kike
Buenos Aires, 19 de junio de 2013